Los aditivos para hormigón son compuestos inorgánicos u orgánicos que no forman parte del concreto y modifican sus características físicas. Su uso está muy extendido en el sector de la construcción sobre todo para lograr una mayor eficacia en el fraguado.
Los componentes principales del concreto son cemento, agua y grava pudiendo incorporar el uso de aditivos, fibras o inclusive un tipo de coloración. A la hora de elaborar este conglomerado artificial, es importante considerar las proporciones de mezcla idóneas. Cuando esto se consigue la mezcla se trabaja mejor y logramos la resistencia apropiada que exige la norma.
Dentro de los tipos de aditivos más usados se encuentran los acelerantes y retardantes para conseguir mayor calidad y eficiencia en los tiempos de fraguado. Hidrófugos para reducir la absorción de agua y antimicrobianos que protegen el producto resultante de los microbios y bacterias.
¿Por qué son importantes los aditivos para hormigón?
El punto fuerte del uso de aditivos para hormigón es que disminuyen el tiempo de fraguado, cuando está fresco, e incrementa la resistencia del material una vez que ya se ha endurecido. Esto se traduce en un menor tiempo de ejecución de la obra y podamos desencofrar las estructuras antes.
Cuando las temperaturas son extremas ya sea por calor o frío el aditivo compensa el lento desarrollo para alcanzar el hormigón la resistencia apropiada. Se evitan agrietamientos en la estructura consiguiendo moldes más homogéneos y resistentes. Dentro de los aditivos más usados en el mercado están los que aumentan la fluidez del hormigón para evitar un curado demasiado rápido y otros retardantes para zonas donde el concreto fragua en poco tiempo.
Desde Estructuras de Hormigón Rubio y Navarro podemos recomendarte los mejores aditivos del mercado al mejor precio. Si necesitas un asesoramiento sobre estructuras o aditivos para hormigón no dudes en consultarnos. Trabajamos en Madrid y en Toledo.